Pastelazo a Avelina Lesper. El inicio de una leyenda.

 

En días pasados en la ciudad de México se llevó a cabo un encuentro para dialogar sobre arte entre la reconocida crítica de arte Avelina Lesper y dos representantes de la comunidad grafitera, Guillermo Heredia y Eblem Santana el encuentro tenía mucha telade donde cortar, se podía prestar para un espacio de debate o un espacio de conciliación, pero todo empezó a ir mal cuando como si se tratara de programa de reality la gente aplaudía fanaticamente los argumentos de avelina o los grafiteros, el moderador, se había metido en un aprieto, si bien podrían pecar de subjetivas ambas partes del debate, no podían pecar de faltos de emoción, ambas partes defienden su punto de vista con fuertes ironías y mucha pasión.

 

 

Creo que para poder llevar a cabo este conversatorio y dejara de ser un diálogo de sordos que no hablan el mismo lenguaje de señas Avelina y los grafiteros no manejaban el mismo cuadro teórico, pero creo que ambas partes hablaban de lo mismo:

Lo estético.

Avelina se refería a una relación de la obra con el espectador por la obra misma, una pieza que dijera por sí misma lo que tuviera que decir.

Los grafiteros se referían a lo estético como una obra que tuviera una buena apariencia y de intrincada trama técnica.

El aporte social.

Avelina y los grafiteros hablaban de un aporte social, mientras Avelina recriminaba por dejar fuera los últimos acontecimientos graves en el país como los 43 de Ayotzinapa o Atenco, los grafiteros hablaban de una verdadera cohesión social cuando los vecinos secundan a los grafiteros para disimular una fiesta mientras los grafiteros realizaban una pinta y ¡Ambos tienen razón! Los referentes de Avelina son el muralismo mexicano y los referentes de los grafiteros es la experiencia del día a día donde los vecinos agradecen una resignificación de bardas pintadas por una decisión burocrática y no con los símbolos del barrio. Y después de todo ¿Porque diablos tiene que tener el arte un aporte social? No veo que al taxista, al panadero o a otras profesiones se les recrimine ese aporte social de sus profesiones.

El aporte artístico.

Aquí es donde Avelina puso el dedo en la llaga, ¡tsssssss! y fue donde firmó su sentencia de #pastelazo, Avelina reconoció el talento de los grafiteros, pero recriminó que repetían un canon preestablecido desde los inicios de la historia del graffiti en los años de 1960 en el Bronx en Nueva York.

Los grafiteros defendieron sus cánones abogando que si no se escribe en cierto estilo las fuentes de sus textos ya no era graffitti, que eso es para crear identidad, para marcar un territorio y expresarse presentes.

Lo que nos faltó fue un proyector y una pantalla grande donde Avelina y los grafiteros pudieran mostrar los ejemplos a los que se referían «Mira Avelina así embellecemos ésta ciudad» «Miren graffiteros, ésto definitivamente tiene potencial pero no es arte» lo cual dio pie a que cada quien imaginara en su preconcebido imaginario lo que quería imaginar y no de lo que estaban hablando.

A final de cuentas se caldearon los ánimos, se interrumpían las intervenciones ambos bandos y al final los opinantes también me daba la impresión de que se levantaron de sus lugares no mas para tirar netas.

Al final hubo un gran barullo y lo realmente inaceptable fue el pastelazo ofertado por la comunidad grafitera a Avelina Lesper, quien quedó como prócer y víctima de la crítica del arte Universal y de seguro ésta anécdota será recordada en cien años en alguna clase de crítica del arte.

No puede ser aceptado bajo ninguna circunstancia éste diálogo de pastelazos, de denostar al contrincante, aquí quien pierde es el arte al no llegar a nuevos acuerdos y posibilidades estéticas.

Por último Avelina es quien al parecer tiene toda la razón al llamar al movimiento grafitero intolerante, dictadura

 

 

 

 

 

 

¡Hola, soy Joel! Actor locutor y titiritero. Desde el 2006 soy director creativo del grupo Títere Vivo. Me he involucrado en proyectos de medios de comunicación, radio, e internet principalmente. Actualmente también soy asesor creativo para artistas que están emprendiendo o desean despuntar su carrera o darle un empuje importante para hacer de su pasión creativa un modo de vida sustentable. Loco por el emprendimiento y el arte he logrado conjuntar éstas dos actividades en una sola y en éste blog te ofrezco herramientas útiles de emprendimiento.

2 commentarios

  1. Snr. Xolotl.
    agosto 6, 2018

    El pastelazo y las agresiones solo validaron las palabras de Avelina al calificarlos como subnormales o infrainteligentes, quedaron como los delincuentes que son, pero finalmente qué se podía esperar de estos salvajes ante la falta de ideas y argumentos era lógica la violencia. Más perturbador aun es el hecho de que se ataque cobardemente a una mujer, peor aun que se aplaudan estas actitudes, aja, y como la sociedad hipócrita que somos después van y se quejan de «machismo», «sexismo», «discriminación», «censura», «feminicidio», etc. etc . etc.
    Por seres de este nivel México es un país de quinta.

    Responder
    1. Joel Vences
      abril 2, 2019

      Claro, pedían diálogo los artistas urbanos y acabó en pastelazo, que triste.

      Responder

Responder a Snr. Xolotl. Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *